La llegada de Mauro Caballero al Oporto es prácticamente un hecho. Quedaría por cerrar la compensación a Libertad por la formación del futbolista, toda vez que no detenta ni siquiera una parte del pase del jugador. Se especuló con una compensación global de 4 millones de euros por los derechos del joven paraguayo, la mayor parte en poder el padre de Caballero. Y la entidad de procedencia reclamaría 1,5 millones.